Raymond Toca Tierra en Comondú como Tormenta Tropical; Activan Alertas en BCS

Tal como anticiparon los pronósticos, la tormenta tropical Raymond tocó tierra durante las primeras horas de este sábado 11 de octubre en las inmediaciones del municipio de Comondú, Baja California Sur. El ciclón, que mantiene vientos sostenidos de 75 km/h, ha generado un estado de alerta máxima en el centro y norte del estado, con un pronóstico de lluvias torrenciales y oleaje elevado.

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó que el centro de la tormenta ingresó por la zona de Puerto Cortés, y se espera que su trayectoria cruce la península en las próximas horas, para luego salir hacia el Golfo de California. Las extensas bandas nubosas del sistema están afectando a gran parte del estado, desde Los Cabos hasta Mulegé, con precipitaciones que podrían causar inundaciones y deslaves.

El Consejo Estatal de Protección Civil, que se mantiene en sesión permanente, ha reiterado el llamado a la población a resguardarse y evitar toda actividad no esencial. Se ha ordenado el cierre de puertos a la navegación en La Paz, Los Cabos y Comondú, y se han habilitado refugios temporales para las familias que habitan en zonas de alto riesgo.

La interacción de Raymond con los remanentes de un frente frío ha potenciado los efectos del ciclón, provocando un descenso en las temperaturas y una mayor acumulación de agua. Municipios como Loreto y Mulegé también se encuentran en alerta, ya que se prevé que la tormenta deje lluvias significativas a su paso por la Sierra de la Giganta.

La respuesta coordinada de las autoridades, incluyendo la Secretaría de Marina (SEMAR) y la Guardia Nacional, es un reflejo de los protocolos preventivos que buscan mitigar los daños. La prioridad absoluta, en línea con la política del estado, es la salvaguarda de la vida humana. Se exhorta a la ciudadanía a no cruzar arroyos y a mantenerse informada a través de los boletines oficiales.

Raymond es un poderoso recordatorio de la fuerza de la naturaleza en esta región de contrastes. La preparación y la respuesta comunitaria son clave para enfrentar el impacto del ciclón, protegiendo tanto a la población como el frágil equilibrio de los ecosistemas sudcalifornianos.